“El sol sale para todos”: cuando la energía limpia construye equidad

En medio de un panorama global de urgencias climáticas, crecimiento poblacional y crisis de infraestructura energética, hablar de oportunidades en vez de amenazas es un gesto político. Es una forma de escoger desde dónde mirar. Y eso fue precisamente lo que propuso Juan Diego Gómez en el Episodio 12 de ASG PODS “El sol sale para todos”: mirar el mundo de la energía no solo como un problema técnico o financiero, sino como un campo fértil para la innovación con sentido social.

En este episodio conversamos sobre iniciativas de energías verdes y renovables, a través de historias reales como en el caso de SUNCOLOMBIA; una empresa comprometida a abordar los desafíos energéticos y climáticos del mundo a través de soluciones innovadoras. A través de estas iniciativas, Juan Diego nos demuestra que sí es posible construir una transición energética justa, rentable y socialmente transformadora, si se parte de un modelo empresarial con visión de impacto y raíz local.

En una conversación profunda, Juan Diego compartió cómo su recorrido —desde el mundo petrolero de Abu Dabi hasta la ruralidad colombiana— ha estado marcado por una búsqueda persistente: demostrar que una empresa puede ser económicamente viable y, al mismo tiempo, catalizadora de bienestar ambiental y social. El concepto de “triple impacto” no es para él un eslogan de marketing, sino el punto de partida de todo su modelo de negocio.

---

De los desiertos a las montañas: el origen de una visión solar

En un país que históricamente ha confiado su matriz energética a grandes hidroeléctricas, hablar de generación distribuida parecía una utopía hace apenas una década. Sin embargo, SUNCOLOMBIA —la primera empresa fundada por Juan Diego— supo leer el momento. No encontró espacio en las ciudades, pero sí lo encontró en las regiones más olvidadas del país. Allí donde no había red, pero sí necesidad. Allí donde llevar energía significaba también llevar salud, educación y conectividad.

Ese mismo enfoque territorial ha sido la clave para construir una narrativa distinta sobre las renovables en América Latina. Mientras muchas empresas multinacionales operan desde lógicas extractivas, replicando modelos de países del Norte, SUN COMPANY optó por construir desde el Sur. Y no solo construyó paneles y sistemas solares: tejió confianza con las comunidades, articuló esfuerzos con gobiernos y convirtió las escuelas rurales en epicentros de innovación frugal.

---

Baterías con propósito: cuando la circularidad se vuelve realidad

Uno de los momentos más reveladores del episodio fue la conversación sobre las baterías de segunda vida. Ese “cementerio tecnológico” que empieza a crecer con el auge de los vehículos eléctricos podría convertirse en un pasivo ambiental enorme. Pero también puede ser —como lo muestra Juan Diego— una fuente de nuevas soluciones.

La alianza para reutilizar baterías de buses eléctricos de alta gama en infraestructuras educativas aisladas no es solo una jugada técnica o logística. Es una declaración ética. Es un ejemplo concreto de cómo la economía circular puede tener impacto social, si se enfoca desde la justicia energética. El término que acuñaron Juan Diego y Juan Carlos Franco de “baterías con propósito” es más que una metáfora: es una forma de resignificar lo que desechamos, de darle una nueva vida a lo que parecía inservible.

---

El sol, el mercado y la competencia: otra forma de hacer empresa

A diferencia de los discursos que ven a la competencia como amenaza, Juan Diego plantea una visión contraria: “El sol sale para todos”. Una frase simple, pero profundamente revolucionaria. Porque implica que el desarrollo del sector energético no debe ser un juego de suma cero. Que las oportunidades existen si se parte de una visión colaborativa. Y que, incluso en un sector históricamente dominado por monopolios, es posible abrir espacio a nuevos actores si se regula con inteligencia y se invierte con propósito.

Esta visión también implica repensar la inversión. En Colombia, como se discutió en el episodio, todavía hay grandes desafíos: estructuras oligopólicas, ausencia de incentivos claros para nuevas tecnologías, y una banca local que apenas empieza a entender cómo financiar estos modelos. Pero el avance ya comenzó. Y si algo quedó claro, es que las oportunidades más transformadoras no necesariamente vienen del extranjero ni de grandes fondos de inversión, sino de actores locales con capacidad de adaptación y lectura del contexto.

---

Un futuro distribuido, descentralizado y esperanzador

Este episodio no se limitó a explicar tecnologías ni a hacer pedagogía energética. Fue, sobre todo, una invitación a imaginar. A pensar en un futuro donde el acceso a la energía no dependa del código postal. Donde las decisiones energéticas no sean exclusivas de los centros urbanos. Y donde las empresas no compitan solo por rentabilidad, sino por impacto.

Quizás el mayor valor de esta conversación esté en su capacidad de recordarnos que hay otras formas de construir desarrollo. Que la transición energética puede ser también una transición cultural, pedagógica y política. Y que si el sol sale para todos, entonces la energía también debe hacerlo.

Desde ASG Pods, creemos que hablar de transición energética sin hablar de equidad es repetir el mismo modelo centralizado que queremos superar. La energía no puede ser solo un indicador técnico o una cifra en un informe: tiene que convertirse en una herramienta para cerrar brechas, para reconocer dignidades y para alumbrar posibilidades donde antes solo había espera.

🎧 Escucha el episodio completo y descubre cómo la generación distribuida está transformando comunidades en Colombia:

Si este episodio te dejó ideas, inquietudes o ganas de conversar, escríbenos a asgpodcast@redlra.com o compártelo usando el hashtag #ConexiónSostenible.

Porque un futuro justo y renovable se construye entre todos, desde los techos hasta las decisiones.